Windows Blue, así son los cambios que llegarán a Windows 8

Windows Blue es un proyecto de Microsoft que podría llegar a productos como Windows 8 a mediados de este año. La compañía tiene pensado acelerar el ciclo de actualizaciones de sus principales productos. De este modo, los usuarios disfrutarán de una experiencia de uso más evolutiva, de una forma parecida a lo que ocurre en otras plataformas como Mac OS, Google Chrome OS o las plataformas móviles Android o iOS. Este proyecto debería traer a Windows 8 cambios en el rendimiento del sistema, mejoras en la interfaz Metro (la pantalla principal) o la personalización del sistema.

Todavía no se conocen muchos detalles concretos de este proyecto denominado Windows Blue, aunque se llevan filtrando informaciones desde el año pasado. En líneas generales, se trata de un cambio notable que Microsoft quiere imprimir en muchos de sus productos y que consistiría en acelerar la llegada de nuevas características y mejoras de rendimiento. Aunque los cambios principales se esperan en Windows 8, también se mejoraría el ritmo de actualizaciones de plataformas como Windows Server 2012, Windows Phone (su sistema operativo para smartphones) o la suite de ofimática Office.

Microsoft ha dejado entrever ya que Windows 8 puede ser una plataforma que resista el paso de los años. La empresa estadounidense realizaría actualizaciones anuales de este sistema por un precio reducido, con una política similar a la que sigue Apple con su sistema Mac OS X. La firma de Windows mantendría la nomenclatura de Windows 8 para no generar una mayor confusión con Windows Blue. Algunos de los aspectos que se retocarían son la interfaz principal Metro (la pantalla que divide las aplicaciones y los accesos directos en bloques a través de la pantalla) o la personalización del sistema. Dentro de este sistema ya se pueden escoger opciones como el color y el tema dominante, y el modo en el que se distribuyen los iconos en la interfaz.

También se incidirá en el desarrollo y evolución de las apps. Este cambio podría suponer un trabajo mayor de los desarrolladores que tendrían que adaptar sus aplicaciones a Windows Blue. Se espera que el despliegue de este proyecto se realice de manera escalonada, primero con Windows 8 y después a través de otras plataformas de la compañía estadounidense. La mayor parte de la información que se ha encontrado sobre este proyecto se desliza de ofertas de trabajo que Microsoft ha publicado en la web.

No obstante, el proyecto de la compañía estadounidense se puede encontrar con un serio problema, sobre todo en lo que atañe a Windows 8. Este sistema ha tenido desde su lanzamiento una acogida más bien pobre del público, y ha comenzado a despertar dudas en algunos fabricantes sobre su capacidad de conquistar el mundo del PC y el tablet. De hecho, la alternativa del sistema de Google Chrome OS está cogiendo fuerza con el paso de los meses. En el caso de que esta tendencia continuara, podría resultar contraproducente para Microsoft que apostara por seguir desarrollando su sistema en base a la plataforma de Windows 8.

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