Cuando Google nos habló de la nueva versión de KitKat, presentó las nuevas cualidades de este sistema operativo en su última versión. Y lo cierto es que dos meses después de la presentación queda palpable que estamos ante un sistema operativo vivo, nuevo y que aún está empezando a rodar. Pero no quiero hablaros de las novedades de KitKat ya que es algo que seguro la mayoría ya conocéis y que además podéis leer en cientos de blogs como este.
La entrada de hoy la voy a centrar en un concepto anunciado por Google y que gustó mucho a la comunidad. Android 4.4 Kitkat está preparado para poder trabajar con terminales menos potentes e incluso con 512 MB de RAM. La verdad es que esto que fue un notición para la comunidad de desarrolladores a día de hoy ya podemos empezar a verlo plasmado en algunos terminales.
Este fin de semana he aprovechado para instalar Android 4.4.1 en mi viejo, pero para nada obsoleto, Samsung Galaxy S i9000. Bueno, la verdad es que me he instalado la 4.4.1 y luego la 4.4.2. y quería compartir con todos vosotros mi grata experiencia.
Lo cierto es que, a pesar del anuncio de Google, tenía mis reticencias sobre la viabilidad de actualizar al viejete Galaxy S hasta la última y más potente versión de Android. Para los nóefitos en el tema os recordaré que el hardware del Samsung i9000 se compone sólo de:
- Pantalla: 480 x 800 píxeles, 4.0 pulgadas.
- Procesador ARM Cortex A8 Hummingbird 1GHz, GPU PowerVR SGX540.
- 8 GB/16GB memoria interna. 2GB ROM.
- 512 MB RAM.
Este terminal que inicialmente tenía Android 2.1 Eclair, se puede actualizar de manera oficial hasta la 2.3.6 Gingerbread. A partir de ahí los escépticos de Samsung decidieron que el terminal ya no podría trabajar correctamente con versiones superiores. Un montón de chorradas puesto que, aquí un servidor, lo ha probado con todas las ROMs cocinadas Ice Cream Sandwich y Jelli Bean que han ido saliendo, y su funcionamiento y consumo, sin ser excelente ha sido más que respetable en todo momento.
Pero bueno, centrándome en las versiones de Android KitKat, que por cierto por si a alguien le interesa me he instalado la ROM de Mokee, os tengo que decir que le han devuelto una fluidez estupenda al teléfono.
Quizá algunos de vosotros tras leer esto puede pensar que con el sistema operativo limpito de aps cualquier teléfono funciona ligero y sin lag y sí, eso es casi siempre cierto, pero es que yo tengo instaladas en mi Galaxy S unas 190 aplicaciones (es mi terminal de pruebas). Y os puedo asegurar que el teléfono funciona muy fluido, incluso más que cuando tenía Gingerbread. Además puedo afirmar que funciona fluido teniendo activadas las animaciones entre pantallas, widgets y demás parafernalias que generalmente relentizan el sistema.
Ahora bien, lo que si que es cierto es que el consumo de la batería ha aumentado respecto a la versión que tenía instalada antes (4.3.1 Slim).
Bueno, con todo esto sólo pretendo haceros partícipes de que la afirmación que hizo Google sobre que Android KitKat funcionaría fluido en terminales antiguos es muy cierta. Así que os animo a que actualicéis vuestros terminales en cuanto podáis.
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