La vida en el siglo XXI no significa ser capaz de ignorar los desastres naturales; Vientos de 150 mph, las olas del tsunami y los terremotos seguirán estropeando el día. Pero vivir en lo que solía serel futuronos permite comprender tales fenómenos. Incluso podemos simularlo, aunque mal. Vivir en 2017 también le permite experimentarlo vicariamente, en una escala macro, en vivo y en casa. Durante años, la gente ha estado recolectando datos geotagged y construyendo capas de mapas en línea, visualizando el transporte marítimo global o pasillos aéreos.Agencias científicaspublicar datos de geosensores satelitales que miden las temperaturas terrestres y marinas. Y podemos usarlas para ver cómo la naturaleza nos recuerda nuestro lugar.
Tome el seguimiento de vuelo. Ayer, Jason Rabinowitz-@AirlineFlyer en Twitter-vivió-tweeted el progreso de un Boeing 737-900 de Delta que corrió hacia y luego fuera del Aeropuerto Internacional Luis Muñoz Marín en Puerto Rico antes de que el huracán Irma diera a conocer su presencia. El avión, volando JFK-SJU bajo el número de vuelo DL 431,aterrizó justo antes del mediodíael miércoles. En menos de una hora, se había reabastecido, tomado 173 pasajeros, y luego estaba de vuelta en su camino a JFK. Esta vez como DL302 -que nos dimos cuenta despegó casimedia hora antesEra el último avión que salía de la isla aquel día.
Leer 3 párrafos restantesComentarios
Tweet |
No hay comentarios:
Publicar un comentario