Si bien la mayoría de la gente probablemente ya haya hecho el cambio, otra razón más para dejar caer los sistemas operativos de 32 bits y pasar a 64 bits viene. La versión 390 de los controladores gráficos de Nvidia, que probablemente llegue en enero,será el último en contener soporte para versiones de 32 bits de Windows(7, 8 / 8.1 y 10), Linux y FreeBSD.
Habrá otro año de actualizaciones de seguridad para los controladores de 32 bits, pero todas las características nuevas, las mejoras de rendimiento y el soporte para el nuevo hardware requerirán el uso de un sistema operativo de 64 bits y controladores de 64 bits.
Las razones para quedarse con Windows de 32 bits son en este punto muy pocas. Windows de 64 bits tiene una seguridad superior a 32 bits, y si bien varía con la carga de trabajo, las aplicaciones de 64 bits pueden ejecutarse algo más rápido que las contrapartes de 32 bits; para cargas de trabajo que no se ajusten a las limitaciones del software de 32 bits, la diferencia es, por supuesto, enorme. En general, aquellos que continúan usando el sistema operativo de 32 bits tienden a estar sujetos a algún tipo de restricción heredada. Los controladores de 32 bits no funcionarán en Windows de 64 bits, por lo que el hardware poco claro pero esencial puede prolongar la vida útil de los sistemas de 32 bits.
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